Homilía para el 32° domingo ordinario 2012
Aprender de los pobres
Textos: 1 Re 17, 10-16; Hb 9, 24-28; Mc 12, 38-44.
La Palabra de Dios nos ofrece hoy el testimonio de dos viudas. Ellas se convierten en modelo de vida para nosotros. Sufriendo la pobreza extrema, fueron capaces de desprenderse de todo lo que tenían para vivir con tal de que los demás tuvieran vida. A la viuda de Sarepta le quedaba solo un puñado de harina y un poco de aceite; la viuda que aparece en el Evangelio contaba únicamente con dos monedas, de muy poco valor, como dos monedas de diez centavos de hoy.