Homilía del 21er domingo ordinario 2011
“¡Dichoso tú, Simón!”
Textos: Is 22, 19-23; Rm 11, 33-36; Mt 16, 13-20.
“¡Dichoso tú, Simón!” (Mt 16, 17), le dijo Jesús a Pedro cuando lo reconoció como “el Mesías, el Hijo de Dios vivo” (v. 16). Llamó dichoso al que, como reflexionamos hace quince días, le había dicho: “Hombre de poca fe, ¿por qué dudaste?” (14, 31). Y le dijo por qué era dichoso. Porque la respuesta a la pregunta sobre lo que ellos pensaban de Jesús no fue invención de Pedro, sino que se trataba de una revelación del Padre. ¿También nosotros seremos dichosos?

El chirrión de Enrique
La FIL con, sin o a pesar de
Reencuentro
La verdad que no muere
Terrorismo, propaganda y mensajeros
