Homilía para el 4º domingo de Cuaresma 2019
Regresar al Padre
Nos hemos reunido para celebrar una fiesta: la Eucaristía. Lo hacemos, como cada domingo, para agradecer a Dios nuestro Padre la Resurrección de Jesús, su Hijo. La Eucaristía es un banquete de pecadores, no de puros y perfectos, sino de hijos e hijas que, por el pecado, nos hemos alejado de Dios y que hemos sido recibidos por Él. Dios es un Padre misericordioso, como lo describe Jesús en el texto del Evangelio que acabamos de escuchar.