Homilía para el 22º domingo ordinario 2105
Poner en práctica la Palabra
Los tres textos bíblicos nos insisten en que la Palabra de Dios es para ponerse en práctica. De otra manera, si la escuchamos y no la traducimos a los hechos, nos pareceremos a aquellos fariseos y escribas a quienes Jesús llamó hipócritas porque conocían muy bien la Escritura, sabían de memoria los mandamientos, conocían todas las tradiciones, pero no ponían en práctica los mandamientos de Dios. Poner en práctica la Palabra nos lleva a la comunión con Dios.