Mes: diciembre 2014

Homilía para la Solemnidad de la Madre de Dios 2015

Bendiciones

María1

En este día agradecemos al Señor el hecho de haber llamado a la Virgen María para pedirle el servicio de ser la Madre de su Hijo Jesús; también le agradecemos el testimonio de María quien, al haber respondido a ese llamado y aceptado el servicio, se convirtió en la Madre de Dios. Hoy es un día de bendiciones. Dios nos bendice y nosotros le respondemos bendiciéndolo. Con la celebración de la Eucaristía unimos esta doble acción de bendición en una sola oración.

Homilía para el domingo de la Sagrada Familia 2014

Formación integral

SgdaFam B 15

En este último domingo del año nos hemos reunido para celebrar la Eucaristía. Con ella damos gracias a Dios por el Nacimiento de su Hijo entre nosotros, por su crecimiento en la vida con José y María y por su Resurrección. El domingo intermedio entre Navidad y Año Nuevo está dedicado a la Sagrada Familia. Por eso los textos bíblicos que acabamos de escuchar hablan de la vida familiar que Jesús, María y José llevaron en Nazaret y de la formación integral del Niño.

Homilía para la Misa de Navidad 2014 (25 de diciembre)

Escuchar la Palabra hecha carne

IMG_6286

Anoche contemplábamos el Misterio del Dios hecho carne y pobre. Es el motivo de la alegría que vivimos de modo especial en este día. Hoy celebramos y agradecemos a Dios que nos hable a través de su Hijo, como escuchamos en los textos bíblicos que se han proclamado. Jesús, el recién nacido, se nos presenta como la más grande Palabra de Dios para la humanidad. En Él, en su presencia empobrecida, en sus enseñanzas y obras, Dios nos comunica su proyecto.

Homilía para la Misa de Navidad 2014 (Medianoche)

Agradecimiento, contemplación, adoración y comunión

IMG_6277

Esta es una noche de Buena Noticia, de agradecimiento, contemplación, adoración y comunión. La Buena Noticia es el nacimiento del Salvador, comunicada en primer lugar a los pastores. El agradecimiento es esta Eucaristía nocturna. La contemplación es del Misterio de Dios que se hace no sólo carne sino pobre. La adoración es nuestra respuesta frente a este Misterio. La comunión es el fruto y el compromiso de todo lo anterior, con Dios y entre nosotros.

Homilía para el 4º domingo de Adviento 2014

Discernir

Adv4 B 15

Estamos celebrando la Eucaristía en el domingo previo a la celebración de la Navidad. En este encuentro de fe, la Palabra de Dios nos presenta a la Virgen María como modelo de apertura a Dios y a su proyecto de salvación. Ella esperaba la venida del Mesías sin saber que sería la elegida para ser su madre. Para recibirlo tuvo que hacer un discernimiento delante de Dios. Reflexionar sobre su testimonio nos ayuda a prepararnos para recibir a su Hijo hoy en la Comunión.

Homilía para el 3er domingo de Adviento 2014

Identidad

Adv3 B 15

Hace ocho días escuchamos un testimonio de Juan Bautista, tanto en su modo de vivir austero como en su misión de prepararle el camino al Señor. Hoy en el Evangelio nos encontramos otro testimonio de su persona y su misión. Aparece la identidad de Juan, bien clara y bien asumida. Reflexionar sobre ella nos ayuda a prepararnos para encontrarnos sacramentalmente con Jesús en la Comunión. Es interesante pensar en nuestra propia identidad: ¿qué decimos de nosotros?

Homilía para el 12 de diciembre de 2014

Servir presurosos como María

VGpe

Nos hemos reunido para celebrar la Eucaristía en el día de la Virgen de Guadalupe. Ella ha estado viendo por los habitantes de estas tierras desde 1531, cuando se le apareció a san Juan Diego y se quedó impresa en el ayate que él usaba. Allí está ella para oír nuestros lamentos, y remediar todas nuestras miserias, penas y dolores, como le expresó al mismo Juan Diego. Hoy, siguiendo la invitación de los obispos mexicanos, le suplicamos la paz para nuestro País.

Homilía para el 2º domingo de Adviento 2014

Voz en el desierto

Adv2 B 15

Este domingo resuena en los textos bíblicos la llamada que el Señor hace a su pueblo para que viva la conversión. Esta invitación es para nosotros hoy y debe resonar en nuestro corazón. La razón de vivir la conversión está en que con ella se le prepara el camino al Señor, porque llega a visitarnos y a quedarse con nosotros. Ojalá que esta invitación no sea una voz en el desierto, en el sentido de que se convierta en un grito que no tenga eco, un grito que nadie escuche.